El número de nuevos casos de coronavirus reportados en todo el mundo cayó un 16% la última semana, completando un mes de descensos en las infecciones de COVID-19, según las cifras de la Organización Mundial de la Salud.
En su reporte semanal sobre la la pandemia, publicado el martes en la noche, la agencia de salud de Naciones Unidas señaló que los decesos bajaron un 10% y mantuvieron la tendencia a la baja observada por primera vez hace una semana. La OMS dijo que hubo más de 10 millones de nuevos casos de la enfermedad y alrededor de 60 mil muertos en todo el mundo. La región del Pacífico occidental fue la única donde el virus aumentó su presencia, con un tercio más de contagios que en la semana previa. Los fallecimientos se incrementaron un 22% en esta zona y en torno a un 4% en Oriente Medio, mientras bajaron en el resto del mundo.
Según la OMS, la variante ómicron sigue siendo la dominante en todo el mundo: de las secuenciaciones de virus compartidas con la mayor base de datos de acceso público del mundo, más del 99,5% correspondían a ómicron y apenas un 0,3% eran de delta. En el último mes no se han notificado casos de ninguna de las otras variantes preocupantes ,incluyendo beta, gamma, lambda o mu, aunque la agencia reconoció que en muchos países hay problemas de seguimiento.
Numerosas naciones europeas, entre ellas Gran Bretaña, Suecia y Dinamarca, han retirado casi todas las restricciones impuestas para frenar la pandemia coincidiendo con el drástico descenso de los contagios y los avances en las campañas de vacunación. En Estados Unidos, los científicos estimaron que alrededor del 73% de la población es ahora inmune a ómicron y que cualquier brote futuro requerirá intervenciones menos drásticas para controlar la epidemia.
Pese a esto, la OMS ha insistido en que es demasiado pronto par declarar el final de la pandemia y advirtió que si el coronavirus se sigue propagando, tendrá más oportunidades de mutar en una versión potencialmente más letal o transmisible.