Enrique Yasser Pompeyo
México es uno de los países del mundo más violentos para el gremio periodístico.
Cada año se registran asesinatos, agresiones e intimidaciones contra la prensa por parte del crimen organizado, así como de las autoridades.
Hace unos días, la organización Artículo 19 dio a conocer su informe “Primer Semestre de 2021: la violencia contra la prensa prevalece, al igual que la inacción del Estado”, del cual dieron cuenta los medios de comunicación.
En el documento se indica que tan sólo en los primeros seis meses de este año, se registraron 362 agresiones, lo que equivale a un periodista agredido cada 12 horas; Veracruz se ubicó entre los primeros siete estados con 18 casos.
Pero la organización también brinda datos sobre el tipo de agresiones; entre las principales documentadas están las intimidaciones y hostigamientos, en segundo lugar, las amenazas, y después los ataques físicos, así como el uso ilegítimo del poder público.
Los principales agresores de los comunicadores son los agentes del Estado que incluye a funcionarios públicos, fuerzas de seguridad y elementos de las Fuerzas Armadas.
Estos cometieron 134 agresiones, lo que representa el 37,33 % de los casos documentados en el periodo.
El pasado proceso electoral fue la principal cobertura de riesgo; integrantes de partidos políticos atacaron a la prensa en 56 ocasiones.
Los representantes de los medios de comunicación se vuelven, así, en un “objetivo a silenciar y censurar en elecciones”.
Otros datos relevantes. Hay un incremento en las agresiones a periodistas por internet, espacio en el que ocurren 1 de cada 3 ataques.
Las agresiones van desde campañas de desprestigio, comunicaciones intimidatorias, hasta ataques cibernéticos e intentos de acceso a sus cuentas.
Lo peor es que tanto periodistas como medios de comunicación se encuentran en un “constante embate de amedrentamiento y las autoridades siguen sin tener preparación o respuesta”.
Un dato alarmante. Artículo 19 documentó 120 agresiones contra mujeres periodistas en el primer semestre de 2021.
Al menos 35 tuvieron un componente de género o connotación sexual; en su mayoría fueron intimidaciones y hostigamientos (49 casos), principalmente a través de campañas de desprestigio y comunicaciones intimidatorias.
También se documentó 46 agresiones digitales contra periodistas mujeres cisgénero y 4 contra mujeres transgénero.
Por lo que se observa, la violencia contra la prensa no muestra alguna señal de revertirse.
El Estado continúa sin cumplir con sus obligaciones en materia de derechos humanos, libertad de expresión y acceso a la información, indica la organización.
Ante la continuidad de la violencia contra periodistas y medios de comunicación, además de las fallas y omisiones del Estado, tanto Artículo 19 y otras organizaciones como Reporteros sin Fronteras urgen a que se apliquen acciones de manera coordinada entre los diferentes niveles de gobierno y entidades para proteger a la prensa, pues en lo que va de la actual administración federal han sido asesinados 22 comunicadores.
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