La Sedena tiene un plan para “mejorar la imagen institucional” y “elevar la moral de las tropas”. La propuesta consiste en utilizar un colorante de la marca Mariposa para teñir los uniformes desgastados de soldados y oficiales, para luzcan como nuevos.
Pese a ejercer este año el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) más elevado en su historia, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) mantiene intocada la orden presidencial de “aplicar una política integral de austeridad” y, en lugar de adquirir uniformes nuevos, ordenará a los militares a solucionar el problema de su rápido desgaste con un colorante de 30 pesos que puede comprarse en cualquier ferretería o centro comercial.
A través de un oficio, se propone que sean los propios soldados y oficiales quienes compren el colorante de la marca Mariposa.
Con esta medida –que le será sugerida al general secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval– sería posible darles la tonalidad que “se asemeja al color que presenta un uniforme nuevo”, señala el director general de Infantería del Ejército Mexicano, el general Carlos César Gómez López.
El colorante de la marca Mariposa, color verde Ultramar 667, es la solución que propone el general Gómez López, director del Armas de Infantería del Ejército Mexicano, quien le comunicó la idea al comandante de la Primera Región Militar (IRM), el general de División Juan Arturo Cordero Gómez, el 17 de mayo, en un mensaje con la referencia “Teñido de uniforme”.
ANTÍDOTO CONTRA UNIFORMES DECOLORADOS
En el comunicado, el general plantea la solución de teñir los uniformes para que la ropa militar recobre su color verde intenso, ya que se ha gastado rápidamente por las inclemencias climatológicas y esto ha hecho que los soldados y todo el personal castrense aparezcan ante los medios de comunicación “mostrando uniformes decolorados”.
Todo esto ha ido en detrimento de la imagen institucional, señala el general Gómez López, quien le comunica al general Cordero la idea de proponerle al Alto Mando (el general secretario Luis Cresencio Sandoval) “una solución inmediata para contrarrestar el efecto negativo provocado por el empleo de uniformes deteriorados por parte del personal militar”.
Una “posible medida” hallada por el general Gómez López es la de teñir a mano los uniformes de campaña tipo selva, de tela pixelada Rpstop, “por medio de una pastilla colorante que se asemeja al color que presenta un uniforme nuevo (sic)…”, señala el texto dirigido desde el Campo Militar 1-D, en Tecamachalco, a la comandancia de la I RM en Chivatito.
A continuación, el mensaje del general explica, en cuartilla y media, los 9 pasos a seguir para lograr un teñido óptimo con el colorante Verde Ultramar 667 de la marca Mariposa, explicando que primero se hizo una búsqueda en el mercado de diversas pastillas para dar con el teñido que se acercara al color original de reciente ministración.
Lo más cercano fue el citado colorante. Luego siguen los 9 pasos para obtener un uniforme verde ultramar que conserve el pixelado original o lo más parecido al que usan los 214 mil 517 militares, hombres y mujeres del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos que conforman hoy el estado de fuerza de la Sedena en todo el país.
Cartas donde se explica la medida de austeridad e instrucciones para teñir el uniforme. Fotos: Especial.
PARA ELEVAR LA MORAL DE LAS TROPAS
El general Gómez López concluye su mensaje pidiéndole al general Cordero Gómez su apoyo para que las unidades operativas de Infantería de la I RM se pronuncien al respecto de la propuesta, a más tardar el 25 de mayo próximo para determinar lo siguiente:
- El procedimiento de teñido del uniforme para elevar la moral de las tropas.
- El teñido no representa un gasto excesivo que impacte la economía del personal militar, ya que el costo de la pastilla colorante es de aproximadamente 30 pesos.
- Se puede comprar en cualquier centro comercial o ferretería del país.
- Este colorante permite prolongar su tiempo de vida útil sin perder el color y textura y contribuye a una mejor presentación del personal en las actividades operativas y administrativas.
Utensilios para el proceso de teñido.
Lo anterior, añade el general Gómez López, con el fin de reunir los elementos de juicio necesarios para poner a consideración del Alto Mando el procedimiento señalado, para que, de autorizarse, se difunda en todo el país con la descripción gráfica correspondiente.
Minutos después de que comenzara a circular en redes sociales el mensaje sobre la propuesta para que los soldados tiñan sus uniformes, apareció el documento gráfico en el que se le enseña paso a paso a la tropa a aplicar el colorante Mariposa para obtener el Verde Ultramar 667, similar al original de sus uniformes.
En 27 fotografías se muestra paso a paso el procedimiento de preparación, lavado, teñido, secado y el final de lo que sería esta medida emergente nunca antes usada para revitalizar los uniformes del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos.
En tanto, la Sedena ejerce este año un presupuesto de egresos de 112 mil 557 millones, de los cuales, mil 434 millones se han destinado a la Industria Militar. De esta última cantidad, 879 millones son para la Fábrica de Vestuario y Equipo (FAVE) de la Defensa Nacional.
Además, la Secretaría ha visto incrementar los fondos del Fideicomiso Público de Administración y Pago de Equipo Militar (FPAPEM), que fue creado en 2007 por la propia Sedena en el marco de su participación en la guerra contra el narco impulsada por el entonces presidente Felipe Calderón Hinojosa.
En su inicio, el FPAPEM comenzó con 5 mil millones de pesos y un manejo discrecional, sin rendir cuentas a nadie. Con Enrique Peña Nieto el fideicomiso para gastos militares superó los 20 mil millones de pesos y rebasó los 31 mil millones en el primer año del mandato de Andrés Manuel López Obrador, alcanzando los 48 mil millones de pesos.
Hoy, el fideicomiso está en 64 mil 600 millones de pesos, sigue creciendo sin medidas de transparencia ni rendición de cuentas, mientras a la tropa se les propone gastar en el teñido de sus uniformes de campaña.
@JorgeMedellin95