
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) solicitó a la Procuraduría de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes de Durango, adscrita al DIF, su “intervención urgente” en el caso de dos niñas de 4 y 5 años que presuntamente fueron violentadas sexualmente por su propio padre, como dio a conocer Animal Político en noviembre pasado.
La madre de las niñas, Mónica Peyro, puso una denuncia por posible abuso sexual desde abril contra quien resultara responsable, pero al ir a terapia en el DIF, en lugar de avanzar en descubrir qué ocurría con las niñas, le recomendaron reconciliarse con su marido, de quien se divorció a finales del año pasado y que trató de quitarle a las hijas, al punto de que fue condenado por sustracción de menores.
Tras varios peritajes y valoraciones médicas y psicológicas, resultó que una de ellas tenía síntomas de penetración y todo apuntaba al padre y el abuelo como figuras de riesgo, por lo que en agosto la madre puso una nueva denuncia por violencia sexual infantil.
Sin embargo, desde entonces no se ha judicializado ni ha avanzado la investigación.
Con estos antecedentes, la Primera Visitaduría de la CNDH envió el oficio CPANF/376/2020 para pedir acciones urgentes directamente a la Procuradora del menor en Durango, Claudia Angélica Tynan López, con copia a la directora general del DIF estatal, Rocío Manzano, además de a la Fiscalía General de Justicia de Durango, al Tribunal Superior de Justicia, a la Comisión Estatal de Derechos Humanos y al Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna).
En ella señala que sin prejuzgar sobre la denuncia de presunta violación sexual, ha habido irregularidades en el proceso y es necesario tomar medidas para proteger a las niñas a la brevedad.