Xico, Ver.- Con más pena que gloria se llevó a cabo la Xiqueñada en el municipio de Xico donde la prohibición de tocar siquiera al toro le quitó el atractivo a la fiesta, uno que otro corneado dejó la celebración que forma parte de los festejos en honor a Santa María Magdalena.
Lo estrecho de la calle de Hidalgo donde se realiza la suelta de los animales y la ambición de los vecinos y prestadores de servicio desmotivó a turistas y locales pues el pago de 200 y 300 pesos por las gradas resultaban muy costoso por lo que muchos optaron por comprarse varios litros de morita y torito con alcohol que pagar para ver la suelta.
La fiesta fue cuidada por más de 200 elementos de seguridad, además de voluntarios.
Debido a que para entrar al ruedo había que registrarse y estar sobrio, muchos optaron por tener sus moritas y toritos en lugares estratégicos.
Solo se anotaron cerca de 300 personas que portaban playera blanca pero muchos más se metieron al ruedo sin registro alguno.
El saldo oficial fue de una fiesta «blanca» pues fueron más los que cayeron por el alcohol que por el golpe de alguno de los 18 toros.
Uno que otro golpeado más en su orgullo que por los animales fueron rescatados en grúas pequeñas que fueron colocadas estratégicamente en cada uno de los tres tramos en que se dividió el ruedo.
Si bien autoridades municipales presumieron más de 60 mil asistentes, la realidad es que el abuso en el precio de las gradas y el poco espacio disponible hizo imposible que cientos de asistentes pudiera siquiera ver pasar uno de los toros.
Salvo los comerciantes locales que vendieron toritos y la tradicional bebida alcoholica conocida como morita, tamales y productos de la zona, los más beneficiados con la derrama económica fueron los vendedores ambulantes foráneos.
El «Encierro y Capeo» de Xico 2017 comenzó en punto de las 12:00 horas, previo a lo cual danzantes rindieron tributo a Santa María Magdalena.
Dos horas después concluyó la fiesta que transcurrió en relativa calma, bajo un sol y calor incesante.
El sector salud instaló 7 módulos de atención, quirófano móvil y dispuso de personal médico, de enfermería y ambulancias.
La afluencia de turistas fue menor que años anteriores debido a que autoridades estatales de la Fiscalía Especializada difundieron que no permitirían la Xiqueñada.Al final la aceptaron.
Se repitió aquí lo mismo que en Tlacotalpan con la suelta de toros de La Candelaria que ahuyentaron al turismo con la prohibición que al final fue violada por los Tlacotalpeños que soltaron por sus pistolas tres de ellos.
Con información de Cambio Digital
