Acusan presuntas irregularidades en caso de detención de maestro

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Xalapa, Ver. (Enrique Yasser Pompeyo).- La señora Matilde Breña señaló que su hermano, el maestro Javier Breña, que fue director del Colegio Nuestro Mundo durante nueve años, fue privado de su libertad de manera injusta.

«Su caso ha estado plagado de errores que cuestionan la actuación del sistema de justicia de Veracruz. Mi hermano, Javier Breña, ha sido acusado falsamente, se le ha privado del derecho de ver a sus hijos y el proceso por el cual ahora se encuentra en el penal de Pacho Viejo tiene graves fallas que no sólo atentan contra sus derechos, sino contra los de sus hijos».

En ese sentido, explicó:

«Se demostró, desde el primer dictamen médico hecho por una profesional, que la supuesta víctima no tenía daño físico, ni daño emocional».

«Los psicólogos que hicieron entrevistas de algunas de las personas involucradas no contaban con la especialidad que se requería en la materia. No mostraron documentación que acreditara su especialización, y unicamente emitieron opiniones y valoraciones sin utilizar en los dictámenes pruebas verificables y profesionales».

«Las autoridades de justicia no siguieron el Protocolo para Juzgar con Perspectiva de Infancia y Adolescencia, que debió guiar el actuar de los juzgadores, tanto en el número de entrevistas hechas a los menores, así como en su formato, desatendiendo con esto los derechos de niñas, niños y adolescentes».

«Hasta ahora, de tres entrevistas realizadas a los menores, sólo se nos ha proporcionado una, en donde se refleja claramente la falta de protocolos aplicados en el proceso, como lo marca la ley».

Por todo ello, la declarante expuso que el pasado 1 de marzo se interpuso una queja ante la Comisión de los Derechos Humanos por el proceder de las autoridades judiciales de Veracruz, quienes durante el proceso «incurrieron en numerosas violaciones a los derechos humanos, a la seguridad jurídica, a la legalidad y al debido proceso».

De manera que, dijo, las pruebas están a la vista:

«Durante la primera etapa del proceso, cuatro diferentes jueces dictaminaron a favor de Javier, porque la denunciante no presentó una sola prueba que lo inculpara, además de que el dictamen médico inicial demostró que la supuesta víctima no presentaba ningún daño fisico o psicologico».

Lo más extraño, aseguró, es que la denunciante, que «fabricó» el caso contra Javier, jamás solicitó el divorcio.

«La ex pareja de Javier no tenía ningún interés en divorciarse sino hasta que se le cumplieran todos sus intereses, en donde incluía quedarse con un colegio que no es de Javier. Lo dejaba claro: «si el colegio no es mío, no es de nadie.»

La persona que acusa al maestro, acotó la declarante, ha rechazado ante la autoridad que se le haga una valoración psicológica profesional.

«En todo caso, estaría utilizando a sus hijos para obtener ventajas materiales, aleccionándolos y disponiéndolos en contra de su papá para destruir el vínculo paterno, lo que se conoce en muchos países y aquí en México, al ser integrado en los códigos civiles de diversas entidades federativas, como alienación parental».

Lamentablemente, agregó, en esta situación, los más dañados son los niños y de muchas maneras, no sólo en el corto plazo, sino para toda la vida.

«Además de la manipulación que ha llevado a cabo la denunciante con las autoridades de justicia de Veracruz para que actúen a favor de sus intereses, el sistema judicial ha dejado a los niños en total indefensión, sin protección alguna ante la presión a la que han sido sometidos por su mamá. Las autoridades de justicia no se han conducido con equidad y sólo se han enfocado en satisfacer el interés de la acusadora».

Lo grave es que los niños, manifestó, sigan creciendo en ese entorno de «mentiras» y alejados de su papá, pues esto tendrá «graves implicaciones» para su desarrollo psicológico y emocional.

Incluso, señaló que la madre de los menores quiere irse a vivir a Canadá y llevarse a los niños, sin considerar a Javier.

«Así lo afirmó uno de los menores durante una entrevista ante autoridades. Pues en este momento, espero que algo se solucione, (…) nada más que le dé a mi mamá lo que le corresponde de dinero y nos deje salir del país…».

Finalmente, adicionó que los niños tienen derecho a convivir con su papá.

Deben ser protegidos de toda manipulación en la que se les utiliza para satisfacer intereses económicos o personales. Queremos hacer esta denuncia pública y agradecer a todas las personas que conocen a Javier, por sus muestras de apoyo y solidaridad. Los niños nunca deben ser usados como botines de guerra ni como armas de venganza».