El gobernador, Cuitláhuac García Jiménez, envió un mensaje al pueblo veracruzano lleno de emoción, mencionó cifras, obras y el avance que ha tenido la entidad veracruzana en estos cuatro años del gobierno de la Cuarta Transformación.
Me queda claro que no todos quedan satisfechos con esos resultados, pero en el Estado de Veracruz hay gobernabilidad y muchos cientos de ciudadanos se dieron cita en el estadio de Beisbol “Gregorio Cruz Vega” de la ciudad de Pánuco, donde celebraron ese Cuarto Informe de Gobierno.
Fue un verdadero gesto de justicia que Cuitláhuac compartiera los aplausos con todo su equipo de trabajo, incluso los mandó a llamar hasta el estrado donde se encontraba y ahí se vieron las caras de felicidad de los integrantes del gabinete estatal.
Vale la pena mencionar el efecto Zenyazen, que provocó las porras y los aplausos por un super nutrido grupo de maestros y trabajadores administrativos de la región norte que le demostraron su afecto con esas manifestaciones.
Estuvieron los 15 secretarios de despacho y todos merecen el reconocimiento por el trabajo que han venido realizando pero el evidente reconocimiento al secretario de Educción del estado de Veracruz fue otra cosa.
Los maestros son gente pensante, respetables y al mismo tiempo muy unidos, es decir, lo mismo lanzan porras o un abucheo como lo han hecho en otras ocasiones, así es que en esta ocasión es de reconocerse la reacción que tuvo el magisterio en este acto, con lo que al mismo tiempo refrendaron su apoyo al gobernador Cuitláhuac García Jiménez.
Zenyazen Escobar García sigue caminando con pasos seguros el rumbo de su proyecto político, al menos ahí demostró el arrastre que tiene con ese equipo de trabajo, que se podría extender fácilmente a lo largo y ancho del territorio veracruzano.
El ex diputado local ha recorrido los peldaños de la escalera política, conoce el terreno de autopista y de terracería, sabe del trato delicado y el trato rudo, difícilmente lo van a doblegar en su intento porque sabe resistir a ese golpeteo que podemos entender que es “normal” en la vida política, al menos en nuestro país.
La jornada de trabajo en Pánuco fue muy alentadora para muchos de los que ahí se dieron cita, pero de manera especial para el titular de la SEV, que pudo respirar tranquilo. Más claro ni el agua.