Por: Felipe Mendiola Parra
No cabe duda que al puntero es al que más le tiran como ha sucedido siempre, pero en el caso del municipio de Emiliano Zapata, el precandidato de Morena a la presidencia municipal, Víctor Peña, continua con paso firme, fortaleciendo su imagen por toda esa gran extensión que colinda con Actopan, Xalapa, Apazapan, Puente Nacional, Coatepec y Jalcomulco.
La gente de ese y otros municipios quiere la presencia de gente joven, sangre nueva que traiga otra visión de cómo mejorar las condiciones de vida de esas poblaciones, porque ver las caras de siempre solo los desalienta con esos discursos repetidos, esas palabras que han servido para otras épocas de la historia de Veracruz, pero ahora se requiere gente preparada, que realmente haya militado en Morena y que conozca las entrañas de ese hermoso municipio.
Víctor Peña no solamente es militante, sino fundador del Movimiento de Regeneración Nacional y ha participado en diversas actividades que le han encomendado, por lo que no hay duda de la pasión que siente por la ideología que abandera Morena.
Ha dicho en sus intervenciones que ahora y cuando esté en el palacio municipal, con el respaldo del voto popular, va a continuar tratando a la gente sin distingos, es decir, a todos por igual porque para él todos merecen ese tipo de atención de las autoridades.
En sus recorridos se le ha visto rodeado de adultos mayores, jóvenes, estudiantes y mujeres que le han refrendado su apoyo, porque confían en sus palabras y en su capacidad profesional que ha demostrado con el currículo, que ha mostrado con un expediente de servicio limpio, sin mancha, porque esa ha sido también su convicción: hacer las cosas bien y en beneficio de la población.
La mayoría de las veces se hace acompañar por su esposa y sus tres hijos con lo que queda demostrado que es un ciudadano de bien, padre de familia y respetuoso de las leyes como lo ha demostrado.
Estos son días de intenso trabajo y no se puede distraer con expresiones desesperadas de sus contendientes, a los que ha demostrado respeto y más respeto, porque una contienda política así debe ser con altura de miras y no enredar las cosas en temas innecesarios. Más claro ni el agua.