Por: Enrique Yasser Pompeyo
Tras los hallazgos de restos humanos en la zona de Coatepec, en el lugar conocido como El puente del diablo, surgen algunas interrogantes.
Primero, cabe recordar que el 31 de diciembre del año pasado, fueron encontradas bolsas negras con los cadáveres de dos personas.
Luego, este lunes, se halló un torso, así como piernas y brazos.
Este martes, de acuerdo con la información, se reportó el hallazgo de una cabeza humana, así como vísceras que se presumen humanas.
Estos hechos sangrientos, ¿son el resultado de una disputa entre grupos delictivos rivales por la plaza?
De ser así, ¿cuáles serían esas bandas criminales que estarían operando en la zona?
¿Se tratará, también, de un mensaje para las autoridades? ¿Un reto?
También llamó la atención que este martes, tras el macabro hallazgo, llegó el director de Servicios Periciales, el fiscal regional de Xalapa, personal de la Comisión Estatal de Búsqueda, así como los denominados binomios caninos K-9.
Fueron no menos de cuatro decenas de elementos de las diferentes corporaciones los que se apersonaron para realizar las investigaciones.
Esta situación, innegablemente, ha encendido las alarmas, pero también ha generado incertidumbre en la población de aquella región.
También llama la atención que, de un tiempo para acá, esta zona, antes apacible, ha pasado a ser un foco de hechos violentos.
Cabe recordar la desaparición, el año pasado, de cuatro personas de la comunidad de Tuzamapan y el posterior hallazgo de sus cuerpos.
También fue muy mediático el asesinato de seis varones (productores y compradores de limón) de esa misma localidad en mayo de 2019.
Las autoridades de todos los niveles de gobierno deben dar una respuesta rápida y contundente para evitar que esta situación escale, particularmente en esta región, pegada a Xalapa, sede de los tres poderes.