La interrupción de clases por las vacaciones de verano representa un retraso de 2.6 meses de aprendizaje para unos 5 millones de alumnos de educación básica en México, lo que puede agudizar el rezago generado por la pandemia, advirtió Daniela Rosales, gerente de Kumon México.
De acuerdo con esta empresa de educación extraescolar, las pérdidas en el aprendizaje durante el receso de verano pueden ser de hasta 2.6 meses en habilidad matemática y de dos meses en habilidad lectora, a causa de la interrupción de las actividades académicas.
“Un alumno del último grado de primaria, es decir sexto grado, tiene una pérdida acumulativa de aprendizaje escolar de hasta 18 meses, derivada de la brecha que significan los periodos vacacionales”, sostuvo.
Rosales resaltó que el cerebro se debe activar y ejercitar todos los días y, en edades tempranas, cuando no se hace puede afectarse el aprendizaje de las materias más susceptibles de ser olvidadas por el alumno, sobre todo en procedimiento, como las operaciones matemáticas, lectura y escritura.
La gerente agregó que las vacaciones de verano, que en México van de finales de julio a fines de agosto, pueden agudizar la brecha académica que dejó la pandemia, de hasta tres ciclos escolares.
Rosales recordó que la mayoría de los alumnos que ingresaron a primer grado de primaria durante la pandemia, que es el curso en donde aprenden a leer, no lo han logrado o tienen grandes deficiencias, debido a que el 75 por ciento de los estudiantes no aprovechó las clases en línea.
Sin embargo, indicó que este fenómeno, conocido como “desfase curricular”, se puede contrarrestar si se aplica una metodología y disciplina de estudio.
“Con 17 a 25 minutos al día de estudio y práctica es suficiente para prevenir la pérdida de aprendizaje en verano”, señaló Rosales.