El volcán Cumbre Vieja expulsa lava que se mueve a 700 metros por hora y con una temperatura de más de mil grados. Se espera que tarde alrededor de 12 horas en llegar al mar.
Ciudad de México, 20 de septiembre (SinEmbargo).- La colada de lava provocada por la erupción del volcán de la isla española de La Palma tiene una altura media de seis metros, ha emitido hasta el momento entre seis mil y nueve mil toneladas diarias de dióxido de azufre y avanza a 700 metros por hora, arrasando a su paso casas, cultivos e infraestructuras.
El Gobierno regional dijo que no esperaba que hubiera heridos tras la evacuación de unas cinco mil personas, pero está dejando una situación “desoladora” en la zona, según ha explicado el presidente del Cabildo, Mariano Hernández Zapata, pues la lava “se come literalmente viviendas, infraestructuras y cultivos que va encontrando en su camino hacia la costa del valle de Aridane”.
Falta poco para que se cumplan 24 horas de la erupción que tuvo lugar a las 15:12 horas del domingo, el nuevo volcán de La Palma, isla que forma parte del archipiélago atlántico de Canarias. La erupción abrió dos fisuras separadas por unos 200 metros (650 pies), podría durar semanas o meses y es probable que las coladas se unan antes de llegar al mar, según las autoridades.
La Unidad Militar de Emergencias (UME) del Ejército español desplegó en La Palma 67 miembros y 30 vehículos ante este desastre natural. Este contingente militar se incrementará hasta alcanzar los 180 efectivos y 57 vehículos. Para esta tarde está prevista la llegada de tres hidroaviones más, informó la Ministra española de Defensa, Margarita Robles, en una entrevista en Antena 3 Televisión.
Además, se está analizando la posibilidad de enviar algún tipo de material y personal especializados en gases por si fuera necesario y la Armada está preparada por si hubiera que “hacer algún tipo de acercamiento por mar”.
Una “verdadera catástrofe”. Así calificó este desastre natural el presidente de Cruz Roja en Canarias, Antonio Rico, quien advirtió la posibilidad de que se genere “un deterioro de la convivencia” en La Palma, por los numerosos vecinos que interrumpieron su actividad normal por un tiempo imposible de predecir, dejando atrás parte de su historia y de su vida.
La Cruz Roja desplazó a la isla a 35 efectivos que ya trabajaban en un albergue habilitado para dar apoyo a las personas alojadas que se encuentra en unas antiguas instalaciones militares ubicadas en Santa Cruz de La Palma, así como a los turistas y efectivos de seguridad y emergencias desplegados en la zona.
Tanto el Presidente de España, Pedro Sánchez, como Protección Civil y otras administraciones implicadas en este fenómeno geológico permanecen desde este domingo en la isla.
El volcán que nació el domingo en la zona de Cabeza de Vaca, municipio de El Paso de la isla canaria de La Palma, se cree que tiene siete bocas eruptivas que emiten lava, unas con más fuerza que otras, y las primeras horas de la erupción son cruciales para entender cómo se desarrollará el proceso eruptivo, dijo a EFE el portavoz del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan), David Calvo.
La Palma, donde viven 85 mil personas, es una de las ocho islas volcánicas del archipiélago canario. En su punto más oriental, las islas están a 100 kilómetros (60 millas) de Marruecos. Antes de la erupción se registró un sismo de magnitud 4.2 en la zona conocida como Cabeza de Vaca, en la ladera occidental de la cordillera.
La última erupción en La Palma, hace 50 años, duró algo más de tres semanas. La última erupción del archipiélago hasta ahora se había producido bajo el agua frente a la costa de la isla de El Hierro, en 2011. Duró cinco meses.
