Debido a las fuertes lluvias que se han presentado en diferentes lugares, el cerro que colinda con el santuario para perros callejeros más grande de toda América Latina tuvo un deslave, afectando a muchos lomitos de la tercera edad.
Se reportaron a cuatro perros que perdieron la vida, cuatro continuaban atrapados y once siguen con vida pero lastimados, los cuales fueron llevados a hospitales caninos para ser atendidos.
Elementos de la policía Capitalina, de Protección Civil y del cuerpo de Bomberos de la capital acudieron al lugar para poder lograr rescatar a los perritos entre los escombros.
En su página, Milagros Caninos, la directora solicitó ayuda con enviar lonas para poder resguardar de la lluvia las croquetas de los caninos.
