El pasado 3 de agosto, un prisionero fue condenado a 25 años de prisión después de asesinar a su compañero de celda, mismo que años antes había violado a su hermana menor, así lo informó el tribunal que llevó el caso.
Shane Goldsby, de 26 años, estaba cumpliendo una condena, en el centro penitenciario de Airway Heights, Washington, por robar una patrulla y herir a un policía estatal desde el 2017; sin embargo, el pasado 2 de junio de 2020, Shane atacó a Robert Munger, de 70, provocándole heridas que lo llevaron a su muerte.
Después de analizar lo sucedido, por la muerte de su compañero de celda, señalado como asesinato en primer grado, Goldsby deberá estar detrás de las rejas por 298 meses, casi 25 años.
Goldsby aseguró que mientras compartía celda con Munger, este describía sus crímenes con detalles gráficos y hablaba de las fotos que tenía de los actos sexuales. Además, después de saber quién era Robert, Shane solicitó otro compañero de celda, pero la petición le fue ignorada.
“Me pusieron en la misma celda que este tipo. Me siento engañado. Soy la víctima”, aseguró el reo.
Tras escuchar repetidamente los actos de Munger, descritos por él mismo, Shane terminó por explotar y atacó a su compañero de celda en la zona común del centro penitenciario.
De acuerdo a las actas judiciales del caso, Goldsby “golpeó a Munger en la cara y en la zona de la cabeza unas 14 veces, pisó su cabeza al menos cuatro veces y pateó al menos un par de veces más antes de ser detenido por los guardias de la cárcel Airway Heights”.
Pese a que el Departamento Correccional de Washington tienen una política de compañeros de celda, que tuvo que haber impedido que Shane y Robert estuvieran juntos, el Departamento Estatal de Correcciones aseguró que “no había ningún indicio claro de que hubiera un posible conflicto”.
Durante la sesión para conocer su sentencia, Goldsby no fue capaz de poder leer una declaración que había preparado con anterioridad, razón por la cual su abogado tuvo que ayudarle. En esta carta, Shane pidió disculpas a la familia de Munger.
“No puedo imaginar lo que sería perder a un ser querido de esta manera. A su esposa y a toda su familia, les pido disculpas. Lo siento mucho y espero puedan curarse de lo que he causado”.
Respecto al momento emocional que vivía en esa época, el hombre de 26 años se dijo inestable, motivado “porque (Munger) seguía queriendo darme detalles sobre lo que había pasado, lo que había hecho -sobre las fotos y los videos de él haciendo estas cosas-. Se estaba acumulando”, reconoció Shane.
Por su parte, Munger estaba cumpliendo una condena de 43 años por los delitos de violación de menores, abuso sexual y posesión de pornografía infantil, incluyendo el ataque a la hermana de Shane Goldsby.
