Felipe Mendiola Parra
En tres meses más, Pemex creará una empresa distribuidora de cilindros de gas a precios económicos en las colonias del país, fue uno de los anuncios que hizo esta mañana el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Ante los problemas macro que existen en el país, uno podría pensar que este incremento que ha tenido el gas en las últimas fechas, podría pasar desapercibido por el presidente pero no es así, porque él sabe que el precio de ese insumo es motivo de encarecimiento de otros productos y sobre todo podría deteriorar la economía en los hoteles y restaurantes que, tienen una fuerte demanda de este combustible.
El golpe a los bolsillos sería generalizado, pero sobre todo a las clases más desprotegidas, donde la imagen del gobierno de la 4-T está muy posicionada, entonces al no poder negociar o regular el precio del gas doméstico, se dará a la tarea de proporcionar ese servicio con un menor costo.
Gas Bienestar se va a llamar y se van a vender cilindros de gas de 20 y 30 kilos a precios bajos en las colonias populares, fue el anuncio oficial.
En su conferencia de prensa mañanera, López Obrador dijo que, con el gas no ha podido cumplir su compromiso de que este producto no aumente, porque Pemex les vende en un precio pero son cinco empresas las encargadas de la distribución que ponen el precio que quieren y que les ofrece grandes beneficios económicos.
Otro caso que está lastimando los bolsillos de los mexicanos, es el precio de la tortilla que en solo seis meses subió de 12 hasta los 20 pesos en algunos lugares y es muy posible que este tema también sea motivo en esas famosas conferencias de prensa que lleva a cabo diariamente el presidente de la república.
Así es que en tres meses la empresa Pemex estará comprando camiones, equipos y cilindros para tender esta demanda y dejó en claro que no se suspenderá el servicio que ya están ofreciendo las empresas particulares, sino tendrán que entrar en la competencia de precios y eso es muy saludable, porque además, en muchas ocasiones esos cilindros vienen “ordeñados” y entrar en aclaraciones con esos empresarios es cuestión de nunca acabar. Más claro ni el agua.
