El buzo italiano que dirigió la búsqueda de víctimas de un naufragio en el Mediterráneo describió este jueves su horror tras hallar el cuerpo de un bebé junto a una mujer que al parecer lo tuvo abrazado hasta el final.
Rodolfo Raiteri, jefe del cuerpo de buzos de la Guardia Costera italiana, confesó en una entrevista a la prensa italiana que el hallazgo había sido la peor experiencia de su vida profesional.
«La vista de ese bebé allá abajo era insoportable, un golpe al corazón», contó al diario la República. «Nunca estás preparado para algo tan intenso como eso», explicó.
Raiteri, de 52 años, relató que «ver ese pequeño cuerpo tendido en el fondo, al lado de lo que probablemente era su madre, fue como recibir un puñetazo en el estómago», contó.
«El hecho de que estuvieran tan cerca, el uno con el otro, y por la posición de los brazos de la mujer, creo que lo tuvo abrazado hasta el final», afirmó