Coatepec, Ver.- (Jair García).- En plena recta final de la pasada administración estatal y en su intento por desmantelar los servicios de salud de Veracruz, fueron entregadas 63 ambulancias.
Pero tales unidades pertenecían al Seguro Popular, esto con el fin de dejar sin esos vehículos a la Secretaría de Salud.
Ahora, la Auditoría Superior de la Federación ha detectado el faltante de las 63 ambulancias, advirtiendo un presunto desvío de recursos, pues dichos vehículos deberían estar adscritos a los hospitales y centros de salud a cargo de los Servicios de Salud de Veracruz.
Sin embargo en el mes de noviembre, a menos de 30 días para concluir su administración, el entonces gobernador Miguel Ángel Yunes Linares a través de su secretario de Salud, Irán Suárez Villa autorizó un contrato de comodato para la entrega de estas unidades que fueron adquiridas en abril de 2018 con recursos del seguro popular.
Al momento de ser adquiridas dichas unidades, se especificó que el fin era brindar atención a los usuarios de los hospitales y centros de salud pero el gobierno yunista decidió entregarlas de manera política a los ayuntamientos.
Y es que (Yunes Linares) ordenó entregar en comodato 66 ambulancias a ayuntamientos; de las que finalmente otorgaron 63, 46 de PAN-PRD; 7 del PRI-PVEM; 3 de MC; 3 de NUEVA ALIANZA; 2 de PES; 1 de MORENA; 1 independiente.
De acuerdo a las observaciones que ya ha notificado la Auditoría Superior de la Federación a la Secretaría de Salud, establece que dicha acción se traduce en una transgresión a las disposiciones legales que impiden su uso para fines ajenos a los señalados por el Seguro Popular, lo que se ha derivado en observaciones pendientes de solventar por parte de los Entes Fiscalizadores y quienes en su momento podrían determinar daño patrimonial.
Son unidades en su mayoría, Nissan NV350, acondicionadas para funcionar como ambulancias y equipadas con aparatos y dispositivos para dar atención en urgencias médicas.
