La renuncia del secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, al comienzo del sexenio es una mala señal por donde se le vea. No es el primer funcionario que además se va por lo que es evidente: la intervención en áreas delicadas del gobierno por incompetentes cuyo único mérito es la cercanía con el presidente.
Dentro de la carta de renuncia vienen frases contundentes que resumen el manejo en materia económica del gobierno federal: «En esta administración se han tomado decisiones de política pública sin el suficiente sustento».
«Me resultó inaceptable la imposición de funcionarios que no tienen conocimiento de la Hacienda Pública. Esto fue motivado por personajes influyentes del actual gobierno con un patente conflicto de interés», dice en otra parte de su carta.
Y es que de entrada, lo que ya es muy evidente también, es el recorte presupuestario a áreas como deporte, ciencia, cultura, salud, etc., para crear una estructura electorera vía los programas sociales, lo que está costaría muy caro a la estabilidad económica del país.
No hace mucho, por ejemplo, nos daba cátedra «El Padrinito» (nos reservamos el nombre porque es un vato muy respetado) precisamente con el tema de las mentadas becas; palabras más, palabras menos, «Padrinito» decía: «es claro que esa lana de las becas a los chamacos es para que sean su base electoral dentro de unos años».
Le daba un trago a su chela Corona y proseguía: «Son los futuros votantes y por eso a la 4T le valen madre los empresarios y los medios de comunicación… Nomás checa los números: hay cuatro millones de pobres en Veracruz y quizás unos 10 mil empresarios o 20 mil empresarios en la entidad, entre ellos los periodísticos… ¿Tú crees que prefieren atender o quedar bien con los empresarios cuando el grueso de votantes los tienen potencialmente en los 4 millones de pobres a los que les van a dar lana mensualmente, aunque sean migajas?».
(Perdóneme, Padrinito, por evidenciar una plática privada. No me vaya mandar a rafaguear)
La renuncia de Urzúa se une precisamente a la de Germán Martínez Cázares, quien también puso en el reflector el tema de los recortes provenientes de Hacienda. Una editorial del diario El Universal, lo subraya en este sentido: «En una carta el 21 de mayo pasado, Germán Martínez acusó recortes y operación de la Secretaría de Hacienda en el Seguro Social. Que funcionarios de esa dependencia operaban sobre sus atribuciones y facultades. Don Germán se fue y regresó a su escaño en el Senado… En otra carta esta mañana, Carlos Urzúa, titular de Hacienda, acusa lo mismo: Imposición. En este caso, de funcionarios que no saben de la Hacienda Pública, y decisiones sin sustento en materia económica, revelando que las directrices se realizaban «sin tomar en cuenta los efectos» de las mismas… Ambos documentos llevan un hilo conductor: la denuncia de que las decisiones económicas no están en Hacienda».
Por cierto, a unos minutos de que Urzúa salió del cargo, portales de negocios como Forbes reportaron: «fue un balde de agua fría en los mercados; el peso cae más de 2.25% y la bolsa, más de 1.2%».
Y es que, por donde se le vea, el tema económico parece ser el talón de Aquiles de la 4T; no por nada persiste ese miedo de que –ojalá y no– terminemos como Venezuela: con un papel moneda que no serviría ni para limpiarse el trasero.
NOTA PARA PEGAR EN EL REFRI: Que quisieron aplicar la de la vieja escuela priísta con los manifestantes de Pajapan que estuvieron todo el día en el Palacio de Gobierno y no querían atender los de la 4T… Les cerraron los baños con llave y luego quisieron amedrentarlos con policías rodeando la sede del Poder Ejecutivo. Lo que no saben es que los paisanos de la sierra de Soteapan están más cuereados que cualquiera de los neo-funcionarios que ocupan las oficinas de dicho inmueble, y fue gracias a la intervención de la Comisión Estatal de Derechos Humanos que tuvieron que desistir de la idea del desalojo o presión en el gobierno estatal… ¿Pos qué tanto les cuesta atender a la gente, chingao?
OTRA NOTA: Que los encargados de la cafetería del Congreso del Estado ahora resulta la quieren operar como si fuese una fonda particular de nivel pedorro. Resulta que a los caricaturistas Alberto Morales «Betogato» y Marcos Cruz «Tlacuilo» de plano ya los querían correr porque solamente pidieron café y no consumían algo más. Todavía les trajeron una Coca-Cola sucia, llena de tierra, de mala gana… Inaudito porque ahora resulta que los nuevos concesionarios se sienten dueños de un espacio que ha sido público por años, por donde siempre han pasado muchos periodistas que cubren esa fuente… ¡Vaya, ni en el Starbucks te corren si nomás pides un café! ¡Qué modos, eh! ¡Ahí la llevan!
LA ÚLTIMA PORQUE SIGUE HABIENDO DENGUE: Circula que #LadyHelicópero estuvo involucrada en el robo de un celular cuando era una empleada de mostrador en una tienda en una plaza en Boca del Río, desde donde saltó al estrellato para hacerse responsable de la Unidad Administrativa de la Secretaría de Gobierno… ¡Qué «herrados» estuvieron al contratarla»! Digo, puede haber compromisos, pero el corazoncito debe dejarse de lado en temas serios como, veamos… ¡El gobierno!.
