Las fuerzas de seguridad españolas han detenido a un militar brasileño, miembro de la comitiva oficial del presidente Jair Bolsonaro que se dirige a Japón para participar de la cumbre del G20, al detectar en el aeropuerto de Sevilla (sur español) una maleta con 39 kilos de cocaína que supuestamente le pertenece.
Fuentes de la investigación informaron a EFE este miércoles que el militar, de 37 años, fue interceptado en un control policial durante la escala que realizaba en el aeropuerto de esa ciudad española, cuando se encontró la droga en la maleta.
El detenido viajaba en un avión Embraer 190 de la Fuerza Aérea, que forma parte de la tripulación de reserva que escolta al presidente brasileño. Bolsonaro viajaba en un Airbus 319 que también iba a hacer escala en Sevilla, pero a último momento se resolvió que parara en Lisboa, Portugal, para completar desde allí el viaje hasta Osaka, el destino final. Estaba previsto que los dos vuelos llegasen este miércoles al país asiático.
El Juzgado de Instrucción número 11 de Sevilla le dictó la prisión provisional sin derecho a fianza. Se le imputa haber cometido delitos contra la salud pública, según fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía citadas por Europa Press.
Bolsonaro ofreció colaborar con las autoridades españolas para aclarar las circunstancias de la detención. «He pedido al ministro de Defensa su inmediata colaboración con la Policía española para el pronto análisis de los datos, cooperando en todas las fases de la investigación», señaló en un mensaje de Twitter.
En su mensaje, Bolsonaro confirmó que fue informado por el Ministerio de Defensa de la detención en Sevilla de un militar perteneciente a la «aviación brasileña que portaba estupefacientes». Al mismo tiempo, defendió a las Fuerzas Armadas y recordó que son «cerca de 300.000 hombres y mujeres formados en los más íntegros principios de la ética y moralidad».
En el caso de que se «compruebe la implicación del militar en ese delito, será juzgado y condenado conforme a la ley», precisó.