Coatepec, Ver.- El párroco de la Iglesia de San Jerónimo, Quintín López Cessa, comentó que si los secuestradores, se arrepienten y dejan de cometer esos actos, alcanzan el perdón de Dios, pues de lo contrario el perdón sería falso.
«El que se arrepiente y tiene propósito de enmienda alcanza el perdón siempre, el problema es arrepentirse y querer salir de ahí», dijo.
Consideró que en ocasiones estos delincuentes suelen abrir su corazón porque sienten el peso de sus actos, de tal manera que buscan refugio en la iglesia ya sea en confesión o no.
«A veces vienen a confesarse, como todos los que confesamos nuestros pecados porque nos arrepentimos. No todo en confesión, a veces vienen a abrir el corazón porque sienten el peso pues son seres humanos», finalizó.