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Dicen que en política, especialmente en tiempos electorales, siempre hay que atacar al que lleva la ventaja; y así el arranque de precampaña del senador Pepe Yunes en Veracruz se convirtió –así como a nivel nacional– en campo donde nuevamente arremetieron contra Andrés Manuel López Obrador.

Quien empezó la ronda de discursos fue precisamente el presidente nacional del tricolor Enrique Ochoa Reza, quien habló despectivamente del «señor López» para decir que anda proponiendo liberar a los peores criminales de este país. No es exactamente así la propuesta, pero la idea es vender esa propaganda como cierta.

Quizás esperaba una reacción más agresiva de los veracruzanos presentes en contra del tabasqueño… La rechifla, honestamente, fue muy obligada, como para no dejar al líder en el ridículo. Incluso Pepe Meade, el precandidato presidencial, quiso hacer apología de una bandera anticorrupción y de paso embarrar a López Obrador… pero como priístas, poca autoridad moral e histórica tienen para hacerlo.

Incluso Meade fue más autocrítico: «Nos duele que Duarte nos haya traicionado con su corrupción», y precisamente los ausentes en el acto fueron aquellos amigos «leales» al ex gobernador en desgracia.

Y es que en lugar de llegar a un Veracruz para verdaderamente criticar lo que está mal, a los dirigentes priistas se les olvidó que el estado está sumido en la inseguridad, la violencia, el desempleo, el cinismo, y prefirieron criticar a López.

También habrá que subrayarse la ausencia de los elementos típicos de un acto del PRI: las tortas, los refrescos, los «prilindros», gorras, camisetas… Quizás porque sea precampaña, quizás porque están en tiempos de austeridad o porque el PRI estatal de plano en finanzas está muy quebrado, pero fue un acto austero. Se nota ahora cuando un evento del tricolor no lo financia el Gobierno del Estado, pues hasta el cambio de dirigencia estatal era un evento casi faraónico.

No es el Veracruz priísta de siempre, de hecho el histórico y magno evento agrario del 6 de enero valió para puro silbato.

Llegaron los de siempre: los gremios que sí pueden trasladarse y moverse con sus propios recursos, porque los demás fueron en «chiquito». Abarrotada fácil la mitad del auditorio con petroleros; de ahí, tropas de cañeros, maestros con su famoso cántico «¡Equipo, equipo!» (aunque en un grupo más pequeño del que se recuerde de otros mitotes como estos); algunos más de la CROC, la CNOP, el Movimiento Territorial, los del sindicato de Trabajadores de la Secretaría de Salud, entre otros.

A comparación de otros eventos, siendo las 11.31 horas, el ambiente radicaba en nombrar a los gremios corporativos de siempre. Reciclaron hasta los saludos; ya sabe: la entrega de papelitos para hacerse destacar con el animador a la vieja usanza.

Reciclaron también a los actores políticos y líderes de siempre, los vetustos, los que se niegan a abandonar el barco para darle paso a generaciones más jóvenes. Personajes que se niegan a abandonar un poder arcaico.

Por cierto, a lo mejor se les pasó a los organizadores, pero si bien era el arranque de la precampaña de Pepe Yunes, no se les ocurrió poner alguna manta o adorno alusivo a Meade Kuribreña.

Y mientras arrancaba el evento de manera muy tardía, más los saludos de Meade y Yunes Zorrilla a toda la flota que pudieron, el evento tardó casi 4 horas en realizarse. Mientras, el «señor López» ya llevaba por lo menos tres eventos al hilo en un sólo día sin tanto mamaseo.

Lo destacado: el mensaje de Meade que sí se acordó –aunque sea tantito– de la situación política para los priistas de la entidad: «En Veracruz vamos por la revancha».

Pero lo que retumbó, aunque sea en aras de una falsa molestia generalizada del PRI, fue lo dicho por Meade: que les duele la traición de Duarte por su corrupción.

Ahora falta ver si la bandera, al menos en Veracruz, les pega.

NOTA PARA PEGAR EN EL REFRI: Cómo estará tan interesante la cosa en Veracruz, que este domingo estuvieron en terreno jarocho los tres aspirantes más fuertes a la Presidencia de México: Andrés Manuel López Obrador, Ricardo Anaya Cortés y José Antonio Meade Kuribreña. El primero tendrá intensa agenda en varios municipios; los dos restantes sólo estuvieron este domingo y ya…

OTRA NOTA PARA PEGAR: Continúa la fractura al interior de Nueva Alianza: el ex alcalde y ex diputado de Cosamaloapan, Juan René Chiunti (identificado con esta corriente política) ha estado estos últimos días cercano a Pepe Yunes y hoy con Pepe Meade. ¿La presidenta de Nueva Alianza, Mérida Mar Domínguez o el diputado Vicente Benítez tendrán la capacidad de mantener firme el partido?

LA ÚLTIMA PORQUE VERACRUZ PUERTO ES MUY TENTADOR: Dante Delgado no acompañó a su precandidato a la Presidencia de la República, Ricardo Anaya, en Xalapa. Se supone que el ex mandatario tendría que ser el personaje que parta plaza en territorio veracruzano; y es que si bien no es panista, se supone que es maestro del queretano… ¿Así se esconderá en futuros actos para que no le tomen fotos con los Yunes?